En el artículo de hoy voy a dar una serie de recomendaciones de cómo combatir la ansiedad. Exactamente son 14 estrategias prácticas que servirán de ayuda a que sea más fácil escapar de este tan temido trastorno psicológico.
Índice del Artículo
- 1 Comprender el mecanismo de la ansiedad
- 2 Aceptar lo que está pasando. No intentar huir
- 3 Respirar lenta y profundamente
- 4 Interpretar correctamente las cosas y situaciones
- 5 Hablar y expresar los sentimientos
- 6 Aprender a ser asertivo/a
- 7 Vivir lentamente
- 8 No estar siempre preocupado/a
- 9 Descansar
- 10 Realizar actividades que te gusten
- 11 Estar activos/as físicamente
- 12 Reír
- 13 Cuidar la alimentación
- 14 No buscar salidas rápidas a la ansiedad
Comprender el mecanismo de la ansiedad
Este primer consejo lo considero el más importante y es que es necesario entender la ansiedad para lograr controlarla como ya os expliqué. Recuerda que la ansiedad es un mecanismo de supervivencia ante situaciones que el cerebro percibe como peligrosas. Las sensaciones corporales son reacciones normales del cuerpo, no son perjudiciales en sí misma, un mecanismo que está preparado para «salvarnos» del peligro no puede al mismo tiempo realizarnos ningún daño. Piensa lógica y racionalmente acerca de la ansiedad.
No te asustes de la ansiedad y poco a poco desaparecerá
Aceptar lo que está pasando. No intentar huir
Si esperas el tiempo suficiente, el miedo acabará por desaparecer. De esta forma, aprenderá a poner en práctica el control de la ansiedad. Sin embargo, si abandona la situación siempre pensará que la ansiedad puede más que usted. Esta es la gran trampa de la ansiedad, la evitación.
¡Enfréntala, comienza a tomar el control sobre ella!
Respirar lenta y profundamente
Utilice la respiración abdominal, para relajarse física y mentalmente e ir tomando el control de la situación. Si respiras pausadamente te ayudará a equilibrar el organismo y recuperar las energías necesarias para hacer frente a tu día a día.
Practícala, repítela con frecuencia y notarás sus beneficios
Interpretar correctamente las cosas y situaciones
Elimina los pensamientos negativos, ¡deja ya de fastidiarte! Ten una actitud positiva y no seas catastrofista viendo el lado menos bueno de la vida, no te lamentes tanto, busca lo positivo de cada situación, esfuérzate por querer seguir adelante y saber que lo qué piensas influirá en cómo te sientes, solo por eso, piensa bien y te ayudará a sentirte bien.
Quizás no puedas elegir lo que te ocurra pero si puedes decidir cómo reaccionar frente a ello
Hablar y expresar los sentimientos
Cuando intento explicar a mis pacientes como combatir la ansiedad de una forma efectiva, uno de los aspectos fundamentales es que deben exteriorizar sus sensaciones, sus miedos. Como ocurre con una olla a presión, necesitas válvulas de escape; si no le quitas la válvula para que suelte la presión llega un momento en el que explota.
Expresa cómo te sientes a menudo, no esperes a estallar, cuenta tu malestar cuando éste aun sea de baja intensidad. Muchas personas se esfuerzan por controlarse intentando a toda costa que las emociones no aparezcan temiendo que los demás se den cuenta. A veces, el temor a parecer más débil o bien preocupar a tu entorno, pero este esfuerzo por contenerse resulta inútil y aumentará aún más la tensión emocional, y el malestar terminará por explotar de forma brusca y descontrolada, a veces con un enfado desmedido, no poder dejar de llorar, un ataque de ansiedad, etc.
No acumules tensiones, ¡Desahógate con frecuencia!
Aprender a ser asertivo/a
O lo que es lo mismo, a buscar el equilibrio entre los demás y tú. Tienes derecho a decir lo que piensas. Olvídate de lo que piensa la gente, se tú mismo/a, dar mucha importancia a lo que piensen los demás siempre te creara tensión y te restará libertad.
No olvides que tienes derecho a no gustar a todo el mundo
Vivir lentamente
Vivir más despacio, a medida que nos apresuramos por la vida, cargando con más cosas hora tras hora, nos estiramos como una goma elástica hacia el punto de ruptura. Evita el exceso de ocupación, el día solo tiene 24 horas. Organízate y prioriza en aquellas tareas verdaderamente importantes. Delega en otras personas, evita acumular tareas y no te responsabilices de lo que corresponde a otros/as.
Vaya más lento/a. Disfruta de cada momento
No estar siempre preocupado/a
Gran parte de nuestras ansiedades vienen originadas por las preocupaciones, pero al fin y al cabo, siempre existirán asuntos que no irán bien, aspectos que no sabremos cómo transcurrirán, situaciones que nos agobiarán, etc.
Uno de los mejores remedios para controlar la ansiedad es centrarse en el presente, del pasado no podemos cambiar ni un solo segundo, así que para qué malgastar energía en algo que ya pasó o en un futuro que no existe, no tenemos control sobre él, no tiene sentido vivir preocupados por algo que aún no ha llegado, así que es muy importante centrarnos en el presente, aceptando todo aquello que forma parte del día a día buscando soluciones a todo lo que sí sea modificable.
«Un exceso de pasado puede causar depresión; un exceso de futuro puede provocar ansiedad; vive el instante, vive en el presente y estarás en paz».
Actúa, soluciona, acepta pero no le des vueltas
Descansar
Dedica tiempo suficiente a descansar y a tener las suficientes horas de sueño. El cuerpo humano necesita reponer energías día tras día.
El descanso es necesario para darle un respiro a nuestra mente
Realizar actividades que te gusten
El estado anímico es un equilibrio entre los aspectos negativos que tenemos a lo largo del día, preocupaciones, obligaciones, etc. y aquellas actividades que nos resultan agradables: dar un paseo, charlar con amigos/as, pintar, hacer manualidades, etc. Realizar actividades que resulten agradables para la persona, no resultan solo una afición sino una necesidad, todos/as necesitamos dedicar tiempo a actividades que nos hagan sentir bien. Además de mejorar nuestro estado anímico, sirven de ayuda para sentirnos menos ansiosos, pues son momentos donde nuestro estado interior es más favorable.
¡Dedícate tiempo para momentos agradables, se feliz!
Estar activos/as físicamente
El ejercicio físico elimina el exceso de activación de la ansiedad y favorece la relajación muscular. Pero no solo hacer deporte puede ayudarnos a sentirnos menos ansiosos, también realizar actividades que requieran movernos, como puede ser caminar, pasear, jugar con los niños, planear actividades, etc.
La pasividad alimenta la ansiedad, gasta el exceso de energía que tienes en tu organismo ¡Muévete!
Reír
Busca momentos donde compartas con amigos, no te aísles porque te sientas mal, todo lo contrario, reír, compartir y relacionarte te ayudará a sentirte mejor.
¡Ríete!
Cuidar la alimentación
Lo que comemos y cómo lo comemos tiene una influencia directa en nuestros estados de ánimo, realizar dietas equilibradas y variadas, mejorara tanto la salud física como el bienestar emocional.
Recuerda que somos lo que comemos
No buscar salidas rápidas a la ansiedad
Cuando se están sufriendo los síntomas de ansiedad, todo lo que supone poco esfuerzo, como puede ser fumar, beber alcohol, tomar sustancias tranquilizadoras, solo nos darán un alivio momentáneo. No suponen ningún beneficio para superar la ansiedad, todo lo contrario; además de consumir sustancias adictivas y los consiguientes efectos que pueden acarrear para nuestra salud, nos daremos cuenta que después de haberlo consumido, nos sentiremos incluso peor que antes de su consumo. El tabaco por ejemplo es un estimulante, si fumas te sentirás más nervioso, el alcohol un depresor, así que después de beber te sentirás más triste.
Soluciona de una forma sana y constante tus problemas de ansiedad
La ansiedad se cura, actúa, no pienses tanto, no observes tanto, vive con tranquilidad…